El perfil profesional de un administrador comercial se enfoca tanto en la gestión como en la dirección de los procesos comerciales de una empresa, con el objetivo de satisfacer las necesidades de sus clientes, maximizar la rentabilidad y la eficiencia de la organización. Para ello, un administrador comercial cuenta con una sólida formación en áreas como finanzas, marketing, gestión de talento humano y estrategia empresarial.
En términos de competencias, un administrador comercial cuenta con una capacidad analítica y de resolución de problemas, habilidades de comunicación y liderazgo, y la capacidad de trabajar en equipo a fin de optimizar el logro de los objetivos de la organización. Además, es capaz de adaptarse a los cambios del mercado y mantenerse actualizado en cuanto a las tendencias y tecnologías emergentes.
En cuanto al campo de trabajo, los administradores comerciales pueden desempeñarse en una amplia gama de sectores y empresas, desde emprendimientos, pasando por pequeñas y medianas empresas hasta grandes corporaciones. Algunos de los puestos de trabajo más comunes incluyen gerencia de procesos estratégicos organizacionales como finanzas, ventas, marketing, director comercial hasta gerencia general. Además, también pueden en consultorías de negocios, instituciones financieras y organizaciones sin fines de lucro, entre otros.